Después de haberse formado en ésta herramienta, una de las profesionales de la Fundación, teniendo en cuenta la oportunidad que de cierta manera brindó la coyuntura del Covid – 19, pues el acompañamiento a las y los chicos se continuó de manera individualizada en sus casas, y no presencial en la sede, logró convocar a la totalidad del equipo (formadores(as), profesionales, colaboradores(as) cocina y mantenimiento), para desarrollar la capacitación a capacitadores(as) y que la Fundación quedara con la capacidad instalada de seguirlo trabajando con las y los niños que acompañan.

Esta experiencia fue muy importante para enriquecer no sólo los conocimientos y herramientas pedagógicas en el acompañamiento a niños, niñas y jóvenes, sino que les permitió fortalecer los vínculos y las relaciones como equipo, y reconocer las habilidades y experiencias mutuas.

Continuamos como Corporación afianzando la alianza con la Fundación El Maná para seguir desarrollando procesos necesarios y pertinentes en la zona urbana, no sólo con las niñas, niños y jóvenes en situaciones de vulnerabilidad, sino también con sus entornos familiares y comunitarios.